Poca gente sabe que muchas estrellas adictas a la nicotina en su vida privada, como Steve Mc Queen, Melina Mercury, Humphrey Bogart, Gary Cooper, John Wayne, Victor Mature… fallecieron de cáncer de pulmón; Yul Brinner y otros, de cáncer de laringe; John Huston y Robert Mitchum…, de enfisema, y Lucille Ball, de aneurisma de aorta. Esos y no otros son los verdaderos motivos que empujaron a muchos actores de Hollywood a abandonar el consumo habitual de tabaco en su vida privada. Sin embargo, en el cine de Hollywood se sigue fumando en el siglo XXI igual que en los años 50, y eso se puede comprobar al analizar las películas del periodo 1950-20001. La única diferencia es que ahora algunos guionistas, productores, actores y actrices cobran un buen plus por ello, o incluso por fumar en actos públicos fuera del rodaje o aparecer con el cigarrillo en reportajes para la prensa. Por el contrario, cuando se rodó Casablanca seguramente nadie percibió un dólar –aunque no pondríamos la mano en el